¿Estamos matando a nuestra propia especie con el calor que generamos al planeta?

El calor que el ser humano genera ha aumentado durante los últimos años. La invasión de zonas que hasta la fecha estaban reservadas solo para los animales y las plantas ha acabado convirtiéndose en una bomba de relojería.

El ser humano ha acabado generando más Co₂ desde el inicio de la industrialización que en los miles de años anteriores. Aunque no se percibe en peligro, especialmente durante los meses de invierno, los veranos son cada vez más cálidos, se ha superado una barrera altamente peligrosa.

Los 40-45º son una realidad que hace unos años parecía inviable, el ser humano ha aprendido a vivir con temperaturas extremas y sistemas para adecuar su entorno con altos consumo de electricidad o de recursos.

Este pez que se muerde la cola está provocando más daño de lo que parece. Fábricas, industria de todo tipo y cada vez más seres humanos habitando un planeta que aumenta la temperatura por momentos.

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El calor lo inunda todo

La temperatura del planeta está llegando a unos límites altamente perjudiciales. El cambio climático no solo llevará sequías a zona del planeta prosperas, capaces de habitarse por el ser humano, va mucho más allá.

El calor hará que el nivel del mar aumente año tras año

El hielo que rodea el planeta dejará de existir o al menos se reducirá de tal forma como está sucediendo hoy en día.

Con un mar más cálido

Los huracanes y las tormentas cada vez más feroces serán una realidad para muchas zonas del planeta. Los desastres medio ambientales pueden generar cientos de muertos año tras año.

Habrá una extensión de especies

Que puede generar un problema mayor, las enfermedades son cada vez más frecuentes. El ser humano se impone sobre una naturaleza que está revelándose en todo momento, la temperatura y las especies en extinción hacen resurgir nuevas enfermedades.

Datos sobre el calentamiento global

Los últimos siete años han sido los más cálidos desde que se tienen registros, ante este dato tan demoledor, el futuro puede acabar siendo peor de lo que se esperaba.

El planeta aumenta de temperatura provocando cientos o miles de muertes cada año, un golpe de calor, la falta de cosechas y el calor que sigue aumentando de forma exponencial puede acabar con la vida tal y como la conocemos.

Estos siete años han batido récords que serán más y más altos, a medida que el tiempo vaya avanzando. Ninguna zona del planeta está a salvo ante una oleada de altas temperaturas que amenaza lugares que nunca han sufrido calor extremo.

La población, edificios y empresas de algunos rincones de este planeta no están preparados para hacer frente a la llegada de las altas temperaturas que se prevén harán acto de aparición durante estos años.

Especies y territorios amenazadas por el calor

Los efectos del cambio climático y esa calor extremo por encima del 70 %, se ubican en países de Centro y Sudamérica (Ecuador 76,6 %, Colombia 76 %, Guatemala 75,4 %) y por encima del 60 % en el sudeste y oeste de Asia (Kuwait 67,7 %, Iran 63,1 %, Filipinas 61,2 %).

Unos datos que golpean durante países y zonas que no están preparados para poder luchar con las armas necesarias a un planeta que les están invitando o desaparecer.

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Solo en nuestro país mueren más de 700 personas a causa del calor en las zonas más densamente pobladas. Estos 704 fallecimientos anuales en las capitales de provincia españolas durante el período de verano (junio-septiembre).

Entre ellos destacan 177 fallecimientos por año en Madrid, 94 en Barcelona, 39 en Sevilla y 38 en Navarra. También fallecen fuera de las capitales, aunque los datos más relevantes están relacionados con aquellas zonas donde la población se concentra de forma masiva.

Un piso sin apenas ventilación de la capital puede acabar siendo una trampa mortal para las personas que viven en él.

Empresas y particulares se unen por acabar con el calor

Los efectos de este calentamiento global ligados a temperaturas extremas afectan a empresas y particulares. Para poder acabar con ellos, solo se necesitan pequeños gestos que pueden cambiarlo todo. Empresas y particulares van de la mano para acabar con este calor extremo que año tras año llega para quedarse.