¿Sabías que el sector industrial es el máximo responsable de los residuos generados? Estos suponen más de un 29% del total. Esto seguido del sector de la construcción, que suponen más de un 27%.

Es decir, si sumamos los residuos de estos dos sectores tendríamos más de la mitad de los residuos que se generan en el mundo. Podríamos concluir por tanto, que reducir los residuos de estos sectores sería un punto clave para mejorar el planeta.

Pero hay más datos que debes conocer y es que no todos los países producen la misma cantidad de residuos, por ejemplo, España es de los países con menos residuos de Europa.

Pero hay un dato más importante y es la cantidad de residuos que no son reaprovechados, es decir, que se mantienen como residuos y no se recuperan en ninguna fase. Se usan una vez durante minutos u horas y contaminan durante decenas o hasta cientos de años.

En este sentido España es uno de los países con mayor presencia de residuos, y es que la fase de reutilización de estos está totalmente estancada o es inexistente.

No aprendemos demasiado de otros vecinos europeos que a pesar de consumir más y por ende generar más residuos, eliminan buena parte de estos gracias a la responsabilidad social de las empresas y de los organismos gubernamentales.

Las reglas están claras en muchos de estos países y el cambio se aplica en el día a día, tanto que la mayoría de países tienen un 53% menos de residuos que España.

En España, cada individuo genera hasta 442 kilos de residuos, según el INE. Pero de estos solo se recuperan 60 kilos per cápita.

Una cifra verdaderamente baja que llena nuestros vertederos. Para comprender el contraste, en la mayoría de países europeos la cifra de recuperación llega a 133 kilos.

Por tanto, el problema no es tanto el consumo y los residuos que estos generan sino el tratamiento que reciben los residuos.

Para reducir esta contaminación sin perjudicar la economía y el crecimiento de un país hay muchas formas. La mayoría de ellas no solo mantienen el crecimiento, sino que lo aumentan.

En la Semana Europea de la prevención de residuos, TÜV SÜD, se han presentado numerosas recomendaciones para reducir los residuos en general, y en particular los más preocupantes: los del sector industrial. Muchas de estas medidas ya se estaban aplicando o se tenían en cuenta, pero otras son más novedosas.

El pilar fundamental es la economía circular, tal y como menciona Diana Abengózar García, consultora y auditora de Soluciones de Sostenibilidad y Buen Gobierno de TÜV SÜD.

La economía circular  mejora los resultados económicos de las empresas, pues reduce el uso de los recursos. A su vez esto contribuye a proteger el medioambiente pues se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero.

También se reduce la dependencia de la importación de materias primas, lo que brinda mayor autonomía a los países y zonas locales.

Esto beneficia la economía local, y ayuda a la reindustrialización del territorio, por lo que se genera empleo en la zona. Finalmente, todo ello estimula la creación de un nuevo modelo industrial, o su desarrollo, que generará crecimiento económico.

Por lo tanto se cumple: el cuidado del medioambiente beneficia a la economía.