Tendencias en marketing: el marketing ecológico llega para quedarse

La ecología ha cobrado protagonismo durante las últimas décadas. Desde que el naturalista de origen alemán, Ernst Haeckel, en 1869, acuñó el término “ecología” esta disciplina ha cambiado mucho.

Inicialmente se dedicaba a estudiar las relaciones de los seres vivos y su ambiente. En pleno siglo XXI el impacto del ser humano en el planeta Tierra ha llevado a esta ciencia hasta lo más alto. Representa una prioridad que llevamos a todos los ámbitos de nuestro día a día.

El marketing se ha teñido de verde, al igual que la mayoría de las disciplinas para ofrecer un valor añadido a las empresas que nos afecta a todos.

Green Marketing o marketing ecológico, ¿qué es?

En esta nueva era del green Marketing se intenta minimizar al máximo el transporte y el almacenaje o el empaquetado de cada producto. Elementos reciclados que contaminen lo menos posible y que sirvan como valor añadido a la hora de realizar la compra. No solo estaremos adquiriendo un aguacate, nos comeremos uno que haya sido producido cerca de casa y no venga empaquetado en plástico.

Con este sencillo ejemplo, el Marketing ecológico ha acabado siendo una prioridad no solo para la empresa, también para el consumidor. Conscientes de que solo tenemos un planeta con el marketing ecológico ganamos todos.

Las 4 claves en las que se basa el marketing ecológico

El marketing ecológico se alza sobre 4 pilares básicos que pueden cambiar para siempre las empresas y los consumidores. Por un lado, reduce gastos y se enfoca directamente en unos objetivos que son comunes para todos.

El impacto medioambiental marca la diferencia.

La huella que genera ese producto o servicio en el medio ambiente deberá ser lo más baja posible para conseguir los objetivos como sociedad o país.

La imagen incrementa las ventas.

Un producto gana, añade un extra que lo convierte en un objeto mucho más deseable. No se compite solo con el precio, sino con las cualidades que lo hacen ser más competitivo. En un mundo global todo pequeño gesto cuenta.

Los gastos se reducen en cuanto a transporte y producción

Usar materiales reciclados, aplicar una política de eficiencia energética. Reducir impacto ambiental en transporte o en embalajes reciclados, de igual forma que en almacenaje, son elementos que benefician a las empresas y al consumir. Un producto más fresco de kilómetro 0, que va directamente a las casas de quienes lo adquieren.

El marketing ecológico es un valor añadido.

El precio puede ser más caro si la empresa es respetuosa con el medio ambiente y ofrece un producto acorde con los deseos del consumidor. Un plus que puede aplicarse de diferentes formas.

Estrategias de green marketing para empresas

? Promover el consumo responsable es uno de los objetivos del marketing ecológico.

? Reducir los excesos y producir o dar el servicio con el menor impacto posible en el medio ambiente es uno de los primeros pasos para dar a conocer una empresa.

? La certificación ecológica es una de las mejores cartas de presentación para un consumidor. El hecho de que un producto sea eco representa un valor añadido. Un precio más alto para una mayor calidad y el hecho de salvar al planeta.

? Una campaña que ayude al medio ambiente. Cada carta enviada o pedido recibido significará la plantación de un árbol en la selva amazónica.

Este tipo de ejemplos son un extra que el consumidor valora y aprecia. El marketing ecológico de una empresa puede incitar a un consumo que provoque un efecto positivo en el medioambiente.

Marketing ecológico: Ejemplos

Una de las campañas que hemos visto llegar los últimos años es la de grandes marcas como Estrella Damm. Su anuncio ‘otra forma de vivir’, dejó a sus seguidores en shock. Una de las industrias más contaminantes, que usaba plástico en sus envases, cambiaba para siempre. Esta compañía cervecera que mira al Mediterráneo creó una campaña que se alejaba de las fiestas y de las terrazas, removió conciencias.

La contaminación de los mares fue lo que convirtió al medio ambiente en el eje central de sus campañas publicitarias. Esta otra forma de vivir, ese entorno que ha visto nacer a una empresa potente recibía lo que merecía. Una campaña que ofrecía ese valor añadido, ese mensaje al consumidor.

La naturaleza y el paisaje se convertían en el eje central del consumo responsable que clamaba a los cuatro vientos ‘otra forma de vivir’.

No solo las bebidas, generadoras de gran parte de los envases que el ser humano debe reciclar año tras año. También la industria de la automoción se ha transformado por completo.

Las campañas del Toyota Híbrido, uno de los más vendidos del mundo. Fue el primero en llegar al mercado, cambió para siempre la automoción, el Prius es un clásico que supuso la llegada del Marketing ecológico a un sector clave para reducir las emisiones de C02.