• El PERTE de descarbonización industrial supone una inversión pública prevista de 3.100 millones y supondrá la creación de unos 8.000 empleos
• Eduardo Ryan (Iberdrola): Las redes eléctricas son imprescindibles en el proceso de descarbonización
• Javier Taberna señala que las empresas navarras ven la descarbonización como una oportunidad, no como una amenaza

Las empresas están adoptando planes para reducir su dependencia derivada de los combustibles fósiles y el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de descarbonización industrial nace con el objetivo de apoyar a estas empresas en sus planes de descarbonización. Las empresas navarras se han sumado a este proceso, lo ven como una oportunidad y están invirtiendo en tecnologías para reducir las emisiones de CO2, pero subrayan que no debe ser un factor que frene su competitividad. Estas son algunas de las ideas que se han debatido esta mañana en una jornada titulada “Cómo descarbonizar la industria ganando competitividad” organizada por la Cámara de Comercio de Navarra y con el patrocinio de Iberdrola.

En la apertura de la jornada, Javier Taberna, presidente de la Cámara de Comercio de Navarra, ha destacado que hay que “hacer posible que la descarbonización de la industria sea una realidad. “En Navarra, las empresas ven este proceso como una oportunidad, más que como una amenaza y saben que la sostenibilidad es sinónimo de diferenciación”, ha afirmado.

Por su parte, Luis Colunga, Comisionado especial para el PERTE de descarbonización industrial del Ministerio de Industria y Turismo, ha explicado que este Proyecto Estratégico nace con el compromiso de apoyar a la industria en su transición hacia modelos y procesos más respetuosos con el medio ambiente y contribuir al objetivo de neutralidad climática en 2050.

El PERTE podría suponer la creación de unos 8.000 empleos

El proyecto supone inversión pública prevista de 3.100 millones de euros con el objetivo de movilizar hasta 11.800 millones de euros de inversión total. El comisionado ha subrayado que el 99% de los proyectos que se están presentando al PERTE generan empleo. Las inversiones en descarbonización y modernización de la industria manufacturera impulsadas a través de este PERTE permitirán incrementar la competitividad del sector en alrededor de un 10% y supondrá la creación de unos 8.000 empleos. En este momento, ya se han presentado 120 proyectos. Colunga también ha destacado que la descarbonización del sector va a suponer una modernización de las instalaciones, el lanzamiento de nuevos productos y promueve la colaboración entre empresas del mismo sector.

El comisionado ha dicho que “hay desconcierto al apoyar a empresas que tienen resultados positivos y beneficios”, pero “estamos obligando a la descarbonización y a realizar inversiones importantes, y debemos garantizar la calidad y competitividad de las empresas y, en muchos casos, como el caso del hidrógeno verde, se puede incrementar el precio un 30 o 40%”.

Las redes eléctricas: columna vertebral de la transición energética

Durante su intervención, Eduardo Ryan, director I-DE Navarra ha explicado que para la descarbonización y electrificación de la economía las redes eléctricas son imprescindibles. Son la columna vertebral de la transición energética, que impone un nuevo paradigma. “Las inversiones actuales son insuficientes: necesitamos poder realizar inversiones anticipadas y aumentar el límite de inversión para lo cual es necesario un marco regulatorio que fomente la inversión en redes”, ha concluido.

En la mesa redonda Santiago Osés, director general de Rockwool; Jesús Calavia, director general de operaciones de Viscofan; Eduardo Glaría, director regional de ingeniería de General Mills, y Erlantz Egidon, responsable de proyectos estratégicos de Kaiku han informado en destalle sobre los proyectos de descarbonización que están implementando en sus empresas, moderados por Alberto Pérez de Ciriza, responsable comercial en Navarra de Iberdrola.

En sus intervenciones, han coincidido en la importancia de mejorar los procesos y hacerlos más sostenibles y circulares y reduciendo al máximo las emisiones de CO2. Todos manifiestan la necesidad de llevarlos a cabo. Sin embargo, como ha explicado Calavia “no puede ser un factor de falta de competitividad”. “Nos dicen que nos descarbonicemos, pero no nos dicen cómo y necesitamos la ayuda del Gobierno, además, en muchos casos nos falta la materia prima como ocurre con el hidrógeno verde”, ha señalado.

La jornada ha sido clausurada por Esperanza Aristu, directora de Transición Energética del Gobierno de Navarra.